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El móvil es una bestia en hardware pero se ve lastrado por la capa de Android que ha modificado Samsung. Gracias a esta capa Android se ajusta a las dimensiones exclusivas de un Samsung Galaxy S8 o S9, pero esto hace que surjan problemas de compatibilidades con aplicaciones tan populares como Instagram. Mi experiencia con esta aplicación ha sido horrible, se cerraba dos veces al día, tenía varios bugs como retardo de zoom en la cámara, sonido permanente de Stories desechadas, pérdida de un 20% del contenido de cada Storie, etc. Cosas que en un iPhone X, no sucede, gracias iOS.
La cámara principal es una pasada, pero la de selfies tiene problemas a la hora de verse fluida la imagen. Luego está el tema de el modo super slow motion a 960fps, en los que solamente puede grabar 2 segundos aprox. y en un rango de 5 segundos de clip, no es como en iPhone que puedes grabar 10 minutos y ya decides después en edición en qué momento quieres que sea a cámara lenta.
Mis únicos puntos a resaltar en mi opinión son la cámara de selfie y la batería.
Cámara selfie: Que no os engañen esos 1.2mpx de cámara selfie, funcionan realmente bien y superan notoriamente a cámaras selfies de 5mpx o más incluso, es sorprendente lo definido que se ve, no sé como lo hace Apple, parece magia. Creí que podía ser por el tamaño de la pantalla, pero al comparar las fotos en el ordenador, el iPhone SE con sus 1.2mpx daba una soberana paliza a los selfies de 5mpx del Samsung S6.
Batería: La batería posee sólo 1642 mAh, parecido al iPhone 5, pero nada que ver. Tuve el iPhone 5 y duraba un día con suerte. Sin embargo, este iPhone SE con un uso bastante intensivo me llega al día y medio, no me imagino cuánto llegará a durar si lo usase poco. La batería tiene un 10 por mi parte.
Edit 24/06/2018: Gracias a iOS 11 la batería ahora sólo me llega a un día o menos.
Por su precio, el LG Nexus 5X ofrece un gran rendimiento, con 63.000 puntos en AnTuTu. Además posee una gran cámara (mejores fotos que con el Apple iPhone 6S o Sony Xperia Z5); tiene gran amplitud de imagen, cuenta con HDR+ y las fotos nocturnas son increíbles, parecería de día sino fuese por el ruido producido por la ISO.
Sin embargo su batería se esfuma, dura un día entero con Bluetooth y GPS activados, gracias a Doze, pero una vez comienzas a jugar o a ver vídeos (donde Doze se desactiva) la batería vuela. Sin embargo, se lleva bien ya que si te ves en apuros en una hora y quince minutos el móvil realiza una carga completa. Pero no posee Qualcomm Fast Charge, sino una carga rápida propia de Google/LG y únicamente carga así de rápido con su cargador oficial, una pena.
El móvil está bastante bien equilibrado, pero la cámara de selfies con 5mpx transmite las mismas sensaciones que las primeras cámaras de selfie; movimiento borroso y calidad acuarela, es decir, horrible. La batería dura un suspiro, apenas puedo salir a la calle seguro pensando en que no se va a agotar la batería. En reposo y con WiFi activado, en una hora consume entre un 2% y 3%, y eso que no está haciendo nada.
La cámara delantera hace unas fotos geniales, tanto que dan ganas de fotografías cualquier cosa ya que da bastante efecto bokeh. La pantalla es de gran calidad; con colores intensos, gran iluminación y negros puros. Sin embargo, la pantalla es demasiado sensible a cualquier tacto, aunque sea un roce.
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